¿Qué son los trastornos de ansiedad?

La ansiedad es un estado mental que normalmente se activa ante situaciones de peligro o amenaza. Se caracteriza por emociones como la intranquilidad, la inquietud, la preocupación excesiva o el miedo. Habitualmente la ansiedad también se manifiesta a través de síntomas físicos como la sudoración o el aumento de la frecuencia cardiaca.^1-3

Sentir ansiedad es algo totalmente normal en determinados momentos, por ejemplo, cuando estamos estresados o cuando alguna situación nos da miedo o nos preocupa mucho, porque la percibimos como una amenaza. De hecho, en ciertos momentos puede ser incluso positiva, ya que nos ayuda a focalizarnos en un problema determinado que nos preocupa. Sin embargo, cuando la ansiedad se convierte en algo habitual, difícil de controlar o aparece en situaciones en las que no debería, puede ser indicativo de un trastorno de ansiedad.^1,2,4

Los trastornos de ansiedad son problemas de salud mental muy comunes, y afectan cada día a millones de personas. Se trata de patologías que influyen de manera negativa en la calidad de vida de los pacientes.^1,4

trastornos ansiedad en mujeres y hombres

Los trastornos de ansiedad son más habituales en mujeres que en hombres⁵

En los hombres, la frecuencia de la ansiedad alcanza su máximo entre los 45 y los 64 años, y en las mujeres lo hace entre los 55 y los 84⁵

Los trastornos de ansiedad y la depresión son patologías muy relacionadas entre sí. Según las encuestas de salud mental en España, más de la mitad de las personas que declara tener alguno de estos problemas afirma tener ambos.⁵

¿Cuáles son los síntomas de la ansiedad?

Los síntomas de los trastornos de ansiedad son muy variados. Entre ellos podemos mencionar:^1,2,4

Pensamientos que se vuelven intrusivos o difíciles de controlar
Sentimientos de inquietud o preocupación excesiva que aparecen de manera frecuente
Dificultad o falta de concentración
Irritabilidad
Manifestaciones físicas como mareos, fatiga, taquicardias o sensación de falta de aire
Apatía: evitar la práctica de actividades cotidianas y aficiones que antes se realizaban

Causas de la ansiedad

Las causas de los trastornos de ansiedad no se conocen con exactitud. Sin embargo, existen algunos factores de riesgo que se han asociado con una mayor probabilidad de desarrollarlos. Entre ellos se encuentran:^6,7

Estrés: los niveles altos de estrés se vinculan con un aumento excesivo de la ansiedad
Traumas: estar pasando por un evento traumático o de mucho dolor puede favorecer la aparición de trastornos de ansiedad
Abuso de sustancias como el alcohol y otras drogas
Otras patologías relacionadas con la salud mental, como la depresión
Determinados tipos de personalidad también son más propensos a desarrollar trastornos de ansiedad
Además, se ha observado que los trastornos de ansiedad tienden a ser hereditarios. Sin embargo, no se conocen genes concretos que se hayan relacionado con el riesgo de desarrollar estos problemas de salud mental

Tipos de trastornos de ansiedad

Se caracteriza por manifestar una ansiedad excesiva en situaciones cotidianas del día a día. Esta ansiedad se vuelve intrusiva y produce en los pacientes una incapacidad para concentrarse y para llevar a cabo sus actividades cotidianas.^4,8

Consiste en el desarrollo de un miedo excesivo a participar en actividades sociales, como reuniones o conversaciones con otras personas. Las personas que lo padecen sienten una preocupación irracional ante situaciones que les generan temor, como sentirse humillados, quedarse sin palabras o quedar en ridículo.⁸

Sus manifestaciones son ataques de miedo intensos en momentos concretos, que pueden llegar a alargarse durante varios minutos. Normalmente van acompañados de síntomas físicos como la aceleración del ritmo cardiaco.^4,9

Las personas con trastornos del pánico también desarrollan una preocupación por volver a tener estos ataques, y por ello modifican sus actividades cotidianas con la finalidad de evitarlos.^4,9

Son trastornos de ansiedad que se manifiestan como miedos intensos e irracionales provocados por cosas que no suponen amenazas reales. Algunas de las más comunes pueden ser la agorafobia (miedo a espacios abiertos o multitudes), la claustrofobia (miedo a los espacios cerrados) o la acrofobia (miedo a las alturas).^10,11

Las fobias específicas generan en las personas que las padecen una gran inseguridad y pueden tener una importante influencia en su calidad de vida.^8,10,11

¿Cómo se puede tratar la ansiedad?

Los trastornos de ansiedad son muy variados y no siempre generan los mismos síntomas, y por ello existen diferentes formas de tratarlos. Los tratamientos que se utilizan con mayor frecuencia en estas patologías son:^2,4,8

Psicoterapia: una de las principales estrategias es la terapia cognitiva conductual, que busca ofrecer herramientas, pautas de comportamiento o formas de pensar que ayuden a reducir la ansiedad
Ejercicios de relajación para ayudar a modular su intensidad
Tratamiento farmacológico: entre los tratamientos se incluyen los fármacos como los ansiolíticos o los antidepresivos

Acude a tu médico si te sientes identificado con alguno de estos síntomas:^1,2,4

Pensamientos intrusivos que se vuelven difíciles de controlar

Estado de ánimo irritable

Exceso de ansiedad en situaciones cotidianas del día a día

Inquietud e intranquilidad frecuentes

Opresión en el pecho, taquicardias, temblor, mareos, falta de aire, etc.

La ayuda de profesionales sanitarios especialistas te proporcionará las herramientas necesarias para hacer frente a problemas relacionados con la ansiedad

Consejos para reducir la ansiedad y mejorar nuestra salud mental

Existen estrategias y buenos hábitos que pueden ayudarnos a reducir los niveles de ansiedad y mejorar nuestra salud mental:³

Es importante conocernos bien e identificar las situaciones que nos generan estrés y ansiedad. Esto nos ayudará a tomar medidas para hacerles frente y no evitarlas.

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Técnicas de relajación y respiración, que pueden ser beneficiosas para mejorar los síntomas físicos de la ansiedad.

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Asegurarnos de disponer de tiempo para nuestras aficiones y las actividades que disfrutamos.

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Practicar deporte, seguir una dieta equilibrada y dormir lo suficiente son importantes para reducir el estrés y la ansiedad.

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Apoyarnos en la familia y los seres queridos.

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